fibra óptica
Un cable de fibra óptica
consta de tres secciones concéntricas. La más interna, el núcleo, consiste en
una o más hebras o fibras hechas de cristal o plástico. Cada una de ellas lleva
un revestimiento de cristal o plástico con propiedades ópticas distintas a las
del núcleo. La capa más exterior, que recubre una o más fibras, debe ser de un
material opaco y resistente.
Un sistema de transmisión
por fibra óptica está formado por una fuente luminosa muy monocromática
(generalmente un láser), la fibra encargada de transmitir la señal luminosa y
un fotodiodo que reconstruye la señal eléctrica.
Este cable está constituido por
uno o más hilos de fibra de vidrio, cada fibra de vidrio consta de:
- Un núcleo central de fibra con un alto índice de refracción.
- Una cubierta que rodea al núcleo, de material similar, con un índice de refracción ligeramente menor.
- Una envoltura que aísla las fibras y evita que se produzcan interferencias entre fibras adyacentes, a la vez que proporciona protección al núcleo. Cada una de ellas está rodeada por un revestimiento y reforzada para proteger a la fibra.
La luz producida por diodos
o por láser, viaja a través del núcleo debido a la reflexión que se produce en
la cubierta, y es convertida en señal eléctrica en el extremo receptor.
La fibra óptica es un medio excelente para la transmisión de información debido a sus excelentes características: gran ancho de banda, baja atenuación de la señal, integridad, inmunidad a interferencias electromagnéticas, alta seguridad y larga duración. Su mayor desventaja es su coste de producción superior al resto de los tipos de cable, debido a necesitarse el empleo de vidrio de alta calidad y la fragilidad de su manejo en producción. La terminación de los cables de fibra óptica requiere un tratamiento especial que ocasiona un aumento de los costes de instalación. Uno de los parámetros más característicos de las fibras es su relación entre los índices de refracción del núcleo y de la cubierta que depende también del radio del núcleo y que se denomina frecuencia fundamental o normalizada; también se conoce como apertura numérica y es adimensional. Según el valor de este parámetro se pueden clasificar los cables de fibra óptica en dos clases Monomodo. Cuando el valor de la apertura numérica es inferior a 2,405, un único modo electromagnético viaja a través de la línea y por tanto ésta se denomina monomodo. Sólo se propagan los rayos paralelos al eje de la fibra óptica, consiguiendo el rendimiento máximo, en concreto un ancho de banda de hasta 50 GHz.
Este tipo de fibras necesitan el empleo de emisores láser para la inyección de
la luz, lo que proporciona un gran ancho de banda y una baja atenuación con la
distancia, por lo que son utilizadas en redes metropolitanas y redes de área
extensa. Por contra, resultan más caras de producir y el equipamiento es más
sofisticado. Puede operar con velocidades de hasta los 622 Mbps y tiene un
alcance de transmisión de hasta 100 Km.
Multimodo. Cuando el valor de la apertura numérica es superior a 2,405, se transmiten varios modos electromagnéticos por la fibra, denominándose por este motivo fibra multimodo. Las fibras multimodo son las más utilizadas en las redes locales por su bajo coste. Los diámetros más frecuentes 62,5/125 y 100/140 micras. Las distancias de transmisión de este tipo de fibras están alrededor de los 2,4 kms y se utilizan a diferentes velocidades: 10 Mbps, 16 Mbps, 100 Mbps y 155 Mbps.
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Ventajas
Desventajas
http://neo.lcc.uma.es/evirtual/cdd/tutorial/fisico/Mtransm.html
http://www2.udec.cl/~jdupre/fibra/ven.html
http://www.uazuay.edu.ec/estudios/sistemas/teleproceso/apuntes_1/optica.htm
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